El gobierno del primer ministro Edi Rama va a allanar el camino para la legalización del cannabis medicinal en Albania. El pasado mes de febrero, el primer ministro albanés preguntó la opinión del país sobre el tema a través de una iniciativa de consulta nacional. El 61% de los ciudadanos albaneses se pronunció a favor de la legalización.
Según los resultados de la encuesta, 308.000 ciudadanos votaron a favor, 148.000 en contra y 51.000 no se pronunciaron sobre la cuestión.
En una declaración a los medios de comunicación albaneses, el jefe del gobierno afirmó que se llevaría a cabo lo que el pueblo había pedido.
«Vamos a legalizar el cannabis y abrir un nuevo frente para el trabajo y el crecimiento económico, además de aumentar el aspecto tecnológico. Lo que dijeron los ciudadanos se cumplirá».
«La voz de los ciudadanos es rotunda y haremos exactamente lo que los ciudadanos quieren, algunas cosas más rápido, otras menos despacio. Es un proceso, pero muy pronto, dentro de unos días, verán a los miembros del gabinete salir con compromisos concretos, para devolver a los ciudadanos la confianza que han dado a este proceso», subrayó el Primer Ministro.
Ya en 2020, Edi Rama había anunciado que preparaba un proyecto de ley para legalizar el cultivo de cannabis medicinal y la apertura de un debate público. Con Covid de por medio, la iniciativa tardó más de lo previsto. El país era uno de los mayores productores de cannabis para el mercado negro europeo hasta que la presión internacional le obligó a actuar, por ejemplo en las zonas de Lazarat.
Más allá del interés económico, el país también intenta ponerse a la altura de sus vecinos, que se han mostrado menos reacios a desarrollar un sector del cannabis terapéutico.