Desde el 1 de mayo, Bélgica reembolsa un tratamiento a base de cannabidiol (CBD) para pacientes con síndrome de Dravet o síndrome de Lennox-Gastaut.
Síndromes raros y resistentes
En Bélgica, alrededor de 200 niños son diagnosticados con síndrome de Dravet o síndrome de Lennox-Gastaut, una encefalopatía epiléptica compleja que se manifiesta generalmente en el primer año de vida.
Esta enfermedad no sólo es difícil de tratar, sino que afecta profundamente a la calidad de vida. Los medicamentos antiepilépticos habituales, como el ácido valproico, la lamotrigina, el topiramato y la rufinamida, suelen ser incapaces de controlar la frecuencia o la intensidad de las crisis.
Esta resistencia terapéutica ha impulsado a las familias y a la comunidad médica a explorar tratamientos alternativos, siendo el más conocido el de Charlotte Figi, la niña que polarizó las capacidades de CBD en el tratamiento de la epilepsia.
En los últimos años, la investigación clínica ha demostrado aún más la eficacia de CBD, sobre todo cuando se utiliza en combinación con clobazam, para reducir la frecuencia de las crisis en pacientes con síndrome de Dravet. Según el Ministerio de Salud Pública belga, esta combinación ha producido resultados mensurables en el tratamiento de esta enfermedad.
«El tratamiento permite a los niños con epilepsia llevar una vida más normal. Por eso ahora pueden contar con el reembolso del cannabidiol», subrayó el ministro Vandenbroucke.
De una carga financiera a una política de apoyo
El coste anual de este tratamiento a base de CBD se estima en 10.000 euros por paciente, lo que lo hace económicamente inaccesible para muchas familias.
«Esta cantidad es inasequible para muchas familias», explicó Billy Buyse, portavoz del Ministro de Asuntos Sociales y Salud Pública.
Con el nuevo programa de reembolso, el gobierno belga pretende aliviar esta presión financiera, con un presupuesto anual previsto de 1,5 millones de euros destinados a cubrir los costes.
El medicamento reembolsado es un preparado magistral en forma de aceite de CBD al 10% elaborado por farmacéuticos.
Para optar al reembolso, se requiere un certificado expedido por un neuropediatra, un neurólogo colegiado en pediatría o un pediatra con experiencia en el tratamiento de la epilepsia. El tratamiento está aprobado para niños a partir de dos años de edad, pero no se limita a la población pediátrica. Aunque las crisis suelen disminuir con la edad, el síndrome de Dravet puede persistir en la edad adulta, con crisis desencadenadas a veces por la fiebre, el esfuerzo físico o la estimulación lumínica.
Bélgica se une así a la creciente lista de países que han empezado a reembolsar los tratamientos de la epilepsia basados en CBD, de acuerdo con las recomendaciones de organismos internacionales de investigación y agencias reguladoras.
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