Cultivar la excelencia: el viaje de Happy Pousse, del asesoramiento al cannabis de máxima calidad

En el corazón de Francia, lejos de miradas indiscretas, Happy Pousse mezcla géneros. ¿Agencia de consultoría? ¿Cultivador de cannabis? ¿Investigador de cannabis? ¿Fabricante de productos? En cualquier caso, Happy Pousse intenta, a su manera, cultivar el mejor cannabis posible en Francia, al tiempo que ayuda a otras empresas a alcanzar todo su potencial. Desde sus humildes comienzos hasta una gran visión de futuro, Happy Pousse es un testimonio de innovación, dedicación y búsqueda incesante de la calidad.

La génesis de Happy Pousse

Happy Pousse no nació del deseo de unirse a la industria del cannabis; nació de la pasión, la experiencia y la búsqueda de la excelencia en torno a las plantas. Los fundadores empezaron cultivando aromáticas, antes de embarcarse en la bioponía urbana en soportes verticales. A esto le siguió una investigación inicial sobre recetas de fertilizantes con la marca de abonos Hesi, lo que supuso su primera incursión en el cultivo de Cannabis.

El verdadero punto de inflexión se produjo cuando, en el marco de un proyecto de asesoramiento, adquirieron una participación en una explotación canadiense de cannabis. Así nació la experiencia de Happy Pousse en el asesoramiento y la gestión de proyectos en el sector del cannabis, tanto a escala internacional como en Francia. La pandemia de COVID-19 frenó su aventura canadiense y les llevó a plantearse la creación de su propia unidad de producción en Francia.

La experiencia de Happy Pousse

La experiencia de Happy Pousse va mucho más allá del cultivo de cannabis. Se trata de la investigación y el desarrollo, especialmente en el campo de la iluminación. Hace cuatro años, se propusieron perfeccionar las recetas de iluminación LED con su socio RED Horticulture, desafiando la dependencia convencional de las lámparas HPS. Hoy en día, están a la vanguardia en este campo, utilizando una iluminación a medida para mejorar el crecimiento y la calidad de sus plantas de cannabis.

También en el invernadero, Happy Pousse cultiva de forma orgánica, en el suelo, utilizando diversas técnicas profilácticas para evitar patógenos como hongos e insectos. Y si llegan insectos, utilizamos la Protección Biológicamente Integrada (PBI), que consiste en producir insectos auxiliares que depredarán a los insectos que puedan suponer un problema.

Con un equipo cada vez mayor especializado en producción hortícola, biotecnología y creación de variedades, y tecnología avanzada, Happy Pousse ha transformado su centro de cultivo interior en un laboratorio de excelencia. Su compromiso con el cultivo orgánico, libre de pesticidas, y su meticulosa atención al detalle en cada etapa del proceso de cultivo, les convierte ahora en verdaderos artesanos de la industria del Cannabis.

Cultivar el mejor cannabis posible en Francia

Lo que en última instancia diferencia a Happy Pousse de la competencia y la sitúa a la par es su compromiso inquebrantable con el cultivo ultra-premium. Sus técnicas están impregnadas de tradición, arraigadas en principios orgánicos y adaptadas a la era moderna.

Happy Pousse cultiva su Cannabis al aire libre, en suelos enriquecidos con enmiendas orgánicas, una metodología que no sólo garantiza un crecimiento robusto, sino que confiere un terroir único a sus productos. El proceso de producción es lo más ecorresponsable posible, con un control preciso de la energía y el agua, la eliminación de artículos de un solo uso y la futura instalación de paneles solares.

Otra garantía de calidad es el meticuloso control de los factores ambientales. La temperatura, la humedad y los espectros de luz se gestionan rigurosamente para optimizar cada fase del crecimiento. El uso de la tecnología de iluminación LED más avanzada permite adaptar con precisión la intensidad de la luz a las necesidades específicas de cada variedad de cannabis, lo que se traduce en sabores y aromas realmente excepcionales.

Pero lo que realmente diferencia a Happy Pousse es su implacable búsqueda de la perfección. Cada planta se somete a un ciclo vital cuidadosamente estudiado, desde una breve fase de crecimiento hasta la floración, con un fotoperiodo controlado con precisión.

Esta atención al detalle continúa durante toda la fase de floración y culmina en el periodo de maduración, cuando las fragancias alcanzan su punto álgido. La recolección es un trabajo intensivo, realizado a mano y seguido de un delicado proceso de secado en ramas en un entorno en el que la temperatura y la humedad se controlan meticulosamente. El resultado es un Cannabis de calidad inigualable, en el que cada detalle es meticuloso y cada etapa cuidadosamente considerada.

Es este compromiso inquebrantable con los métodos de cultivo orgánicos y artesanales, combinado con la tecnología de vanguardia, lo que hace de Happy Pousse un OVNI en Francia. Sus productos no son sólo Cannabis; son un testimonio del arte y la dedicación que demuestran, a su manera, para tratar de cultivar el mejor cannabis posible en Francia hoy en día.

Servicios de asesoramiento que dan forma a la industria

Pero sus instalaciones de cultivo de interior son, en última instancia, sólo una sala de exposición de sus capacidades,. La actividad principal de Happy Pousse es el asesoramiento y la gestión de proyectos para empresas de todo el mundo. Trabajan con líderes del sector como Red Horticulture, Hesi y Royal Queen Seeds, ofreciendo no sólo investigación, sino también asesoramiento sobre venta de semillas, apoyo a proyectos y asesoramiento técnico.

El alcance de Happy Pousse se extiende por todo el mundo, desde el diseño del centro de cultivo de Royal Queen Seeds en Tailandia hasta la gestión de proyectos a pequeña y mediana escala en Francia. Su experiencia abarca todos los aspectos del cultivo, desde la instalación técnica hasta la gestión del cultivo, lo que les convierte en socios inestimables en la industria del cannabis.

La marca y los productos: Happy Pousse en Francia

Happy Pousse se ha labrado un lugar único en el mercado francés del cannabis dando prioridad a la calidad sobre la cantidad. Su gama de 8 a 10 productos de alta gama – desde el e-líquido a la miel de CBD, pasando por los vapes HTFSE con su cartucho de circonio y, por supuesto, sus flores de CBD – muestra la experiencia francesa en el cultivo de Cannabis. Al igual que un buen champán, sus productos son un testimonio de la calidad francesa y de su compromiso con unos estándares excepcionales.

Actualmente, sus productos están disponibles en una decena de tiendas de la región de Lyon. Sin embargo, tienen ambiciosos planes de expansión y les gustaría estar presentes en varios departamentos en un radio de 50 a 100 kilómetros, para poder expandirse localmente.

Su visión va más allá de la banal producción en serie; quieren trabajar con socios que defiendan productos franceses, transparentes, trazables y de comercio justo, con la posibilidad de trabajar con marca propia, marca blanca o a granel.

Planes de futuro y la búsqueda del cannabis medicinal

Los sueños de Happy Pousse van más allá de los productos de cannabis de alta gama. De hecho, la empresa quiere adentrarse en el campo del cannabis medicinal, aprovechando su infraestructura y experiencia. Tras aventurarse en el cultivo de cannabis medicinal en Canadá y Macedonia, donde acompañan a un productor de cannabis medicinal cuya producción se distribuye a pacientes alemanes, esperan con impaciencia el día en que Francia abrace las posibilidades del cannabis medicinal.

En el panorama siempre cambiante de la industria del cannabis, Happy Pousse es un símbolo de innovación, calidad y dedicación. Con un firme compromiso con el cultivo ecológico, una investigación pionera y una visión de futuro, esta joya francesa está llamada a dejar una huella indeleble en el mundo del cannabis. La trayectoria de Happy Pousse es un testimonio de lo que la pasión, la experiencia y la búsqueda incesante de la excelencia pueden conseguir en un sector en rápido crecimiento.

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https://happypousse-france.com/