La fiscal general de Hawai, Anne Lopez, ha presentado recientemente su plan para legalizar el cannabis para consumo de adultos, lo que supone un paso importante en los esfuerzos del estado por desarrollar su industria cannábica.
Aunque el estado de Hawái ha permitido el cannabis con fines médicos desde 2000, el plan propuesto pretende establecer un marco regulado para el cannabis recreativo, abordando las deficiencias de los intentos legislativos anteriores.
La evolución de la política del cannabis en Hawai
El camino de Hawái hacia la legalización del cannabis de uso adulto no ha estado exento de baches. A principios de este año, un proyecto de ley para legalizar el cannabis recreativo fue aprobado por el Senado, pero fracasó en la Cámara de Representantes. La reciente propuesta del fiscal general López, de 294 páginas, se considera un gran avance, y los legisladores elogian su minuciosidad y su enfoque estratégico.
Una de las características destacadas del plan de López es la estructura fiscal propuesta. El plan propone un impuesto especial del 4,25% sobre el cannabis para adultos, acompañado de un recargo del 10%. Estos impuestos ayudarían a financiar la aplicación de la ley y programas educativos destinados a salvaguardar el bienestar de los jóvenes. El senador Jarrett Keohokalole, presidente de la Comisión de Protección del Consumidor, acogió con satisfacción el plan, afirmando que es «la mejor versión hasta la fecha» y que aborda las cuestiones planteadas en anteriores intentos de reforma de la política sobre el cannabis.
Inspirada en el modelo de Massachusetts, la propuesta del Gobernador incorpora un programa de equidad social que pretende corregir las injusticias perpetuadas por años de prohibición del cannabis. Incluye subvenciones y programas de apoyo para ayudar a los cultivadores ilegales a pasar al mercado regulado, haciendo hincapié en la importancia de incorporar a la legalidad a quienes antes se dedicaban a actividades ilegales. López subrayó que «lo más importante que podemos hacer es incorporar al mercado legal a las personas que cultivaban y vendían marihuana ilegalmente».
El plan prevé la creación de la Autoridad del Cannabis de Hawai, que se encargará de regular la industria del cannabis, hacer cumplir la ley, poner en marcha programas de pruebas de laboratorio para garantizar la seguridad del producto y lanzar iniciativas de equidad social y educación sanitaria.
Apoyo a la industria del cannabis medicinal
La propuesta muestra una gran sensibilidad hacia la ya existente industria del cannabis medicinal. El recargo del 10% sobre el cannabis no se aplicará a las compras de cannabis medicinal, en interés de los pacientes. La venta al por menor de cannabis para consumo de adultos deberá comenzar 18 meses después de la entrada en vigor de la propuesta, siendo los dispensarios médicos los primeros en verse afectados.
Aunque algunos legisladores se muestran optimistas sobre la posible introducción y aprobación del plan durante la próxima sesión legislativa, otros advierten sobre el ambicioso calendario. David Tarnas, presidente de la Comisión Judicial de la Cámara de Representantes, señala posibles dificultades, citando la concentración de la legislatura en la lucha contra los recientes incendios forestales y las negociaciones sobre el presupuesto estatal.