Alemania quiere liberalizar la producción de cáñamo

Alemania emprende una importante reforma normativa con la Ley de Liberalización del Cáñamo Industrial (Nutzhanfliberalisierungsgesetz – NLG), un proyecto de ley para clarificar y eliminar barreras dentro de la industria del cáñamo.

El Ministerio Federal de Alimentación y Agricultura alemán ha publicado el proyecto de ley, que actualmente está siendo sometido a un proceso de consulta interministerial. Este proceso incluirá comentarios de varios ministerios y agencias gubernamentales. Una vez finalizada la consulta, el proyecto será revisado y, a continuación, deberá ser aprobado por ambas Cámaras del Parlamento y firmado por el Presidente para convertirse en ley.

Distinción clara entre cáñamo industrial e intoxicantes

Uno de los principales objetivos del proyecto de ley es establecer una clara distinción entre el cáñamo industrial y las sustancias intoxicantes. Históricamente, el sector ha luchado contra una cláusula de la legislación alemana que sugería la posibilidad de colocarse consumiendo grandes cantidades de cáñamo industrial. Esta «cláusula de intoxicación» ha sido un obstáculo importante, que ha dado lugar a prohibiciones, asaltos a tiendas de CBD y acciones penales contra los alimentos de cáñamo y los productos de CBD.

Marijn Roersch van der Hoogte, vicepresidenta y jefa del departamento de cáñamo industrial de la Asociación Alemana de Empresas de Cannabis, declaró: «Este proyecto de ley es un paso final para sacar claramente el cáñamo del derecho penal. Esto es crucial porque abrirá la puerta a mayores inversiones», según comentarios recogidos por HempToday.

Al eliminar esta cláusula, la nueva ley pretende proporcionar una base estable para los productores, garantizando que el cáñamo ya no esté vinculado al derecho penal. Se espera que la medida impulse la inversión y equipare el sector alemán del cáñamo comestible con otros mercados internacionales.

Aunque la ley pretende promover el cáñamo industrial, también adopta una postura firme en cuanto a la prohibición de los productos comestibles de cáñamo intoxicantes. Estos productos, que a menudo contienen compuestos sintéticos derivados del CBD, han aparecido en diversos mercados de todo el mundo. El proyecto de ley prohíbe explícitamente estos compuestos, reforzando el hecho de que el cáñamo industrial no debe asociarse con efectos intoxicantes. Los que contengan THC natural serán, no obstante, legales en virtud de la legalización del cannabis en Alemania pero, según tenemos entendido, no podrán comercializarse en los canales «mainstream».

El proyecto de ley también aborda la cuestión de los productos a base de CBD, una importante área de controversia. Establece que los productos a base de CBD podrán comercializarse legalmente si alcanzan el umbral del 0,3% de THC y cumplen la normativa sobre nuevos alimentos, aunque ésta aún no existe.

Ampliación de las posibilidades de cultivo del cáñamo

Otro aspecto destacable del proyecto de ley es el énfasis en la promoción del cultivo del cáñamo. La ley reconoce que, a pesar de las subvenciones agrícolas de la UE, la superficie dedicada al cultivo de cáñamo en Alemania no ha aumentado como se esperaba.

Para remediarlo, la ley propone ampliar las oportunidades de cultivo y flexibilizar los requisitos para la manipulación del cáñamo industrial. Abre el cultivo del cáñamo a un mayor número de operadores, sobre todo en los sectores de la silvicultura, la horticultura, la piscicultura y la apicultura. También fomenta el cultivo a cubierto, destacando sus ventajas en términos de control del contenido de principios activos y ampliando las posibilidades a las zonas rurales.

Para subrayar la postura progresista del proyecto de ley, se permitirá a los particulares cultivar hasta tres plantas y poseer hasta 50 gramos de flores de cáñamo en casa. Esta disposición pretende desmitificar aún más el cáñamo industrial y convertirlo en parte de la vida cotidiana. En Francia, un particular no puede cultivar cáñamo .

El proyecto de ley introduce una norma que permite aumentar los niveles de THC hasta un máximo del 1% durante la producción de determinados productos, como el té y el CBD, siempre que el producto final no supere el límite de 0,3% de THC. Sin embargo, el proyecto de ley es impreciso sobre si se puede vender material parcialmente procesado que supere el umbral del 0,3% de THC.

El proyecto de ley también destaca los beneficios medioambientales del cultivo del cáñamo, en línea con la estrategia de desarrollo sostenible de Alemania. Se destaca la capacidad del cáñamo para mejorar los suelos enriqueciéndolos con nitrógeno del aire y proporcionando un hábitat para los insectos. La ley señala que el cáñamo industrial ofrece diversos beneficios en términos de sostenibilidad, mitigación del cambio climático y biodiversidad.