Un nuevo informe publicado el miércoles por un grupo de expertos convocado por el Departamento de Salud Pública de California (CDPH) hace una serie de recomendaciones políticas importantes que alterarían radicalmente el panorama del mercado del cannabis en el estado, como limitar el contenido de THC de la flor y los concentrados de cannabis, exigir que los productos se vendan en envases sencillos y establecer un monopolio estatal del cannabis, similar a las tiendas que operan en Quebec.
He aquí un vistazo a sus recomendaciones y el impacto potencial que podrían tener en el mercado del cannabis de California.
El tema de la potencia del cannabis en California
El informe High Potency Cannabis Think Tank destaca una tendencia crucial: el cambio gradual de la industria del cannabis hacia productos con alto contenido en THC.
El contenido de THC de las flores de cannabis supera a menudo el 20%, mientras que los concentrados alcanzan a veces el 90% de THC. El informe advierte de que este aumento de la potencia podría incrementar los trastornos asociados al consumo de cannabis y tener un impacto negativo en la salud mental. También muestra su preocupación por el atractivo de los productos más potentes para los consumidores jóvenes y subraya la necesidad de una regulación proactiva para limitar el acceso y la exposición a estos productos.
«Nuestras recomendaciones se centran en la regulación del cannabis… teniendo en cuenta los efectos nocivos del consumo excesivo de una sustancia tóxica legal y protegiendo a los jóvenes«, explica Rosalie Liccardo Pacula, de la Universidad del Sur de California.
Una de las principales recomendaciones es fijar topes al contenido de THC: 25% de THC para la flor de cannabis y 60% para los concentrados. Los productos comestibles también estarían sujetos a una regulación más estricta, con un máximo de 10mg de THC por envase – actualmente es de 100mg.
Los productos con un alto contenido de THC deberían envasarse en envases sencillos, lo que limitaría los elementos de marca y diseño susceptibles de atraer a los jóvenes. El informe también pide que se prohíban los productos con sabor a cannabis, similares a las prácticas de la industria tabaquera destinadas a reducir el atractivo para los jóvenes.
Modelo de venta en monopolio público
El informe recomienda que California adopte un modelo de monopolio público para la venta de cannabis, similar al modelo de la Société Québécoise du Cannabis (SQDC) en Quebec.
Este modelo establecería una mayor supervisión gubernamental y reduciría los puntos de acceso al mercado ilegal.
En California, esto podría afectar especialmente a las regiones que han optado por no legalizar el cannabis a nivel local. Un modelo centralizado podría permitir a las autoridades estatales aplicar políticas uniformes sobre potencia, envasado y acceso de los jóvenes.
Reforma fiscal basada en el contenido de THC
El informe sugiere reestructurar el sistema fiscal del cannabis de California adoptando un modelo basado en el contenido de THC, alejándose de la actual estructura ad valorem basada en las ventas.
Al vincular los tipos impositivos al contenido de THC, el Estado podría desincentivar los productos de alta potencia, que suelen estar relacionados con mayores tasas de adicción al cannabis y problemas de salud mental.
Restricciones a la publicidad y la comercialización
Reconociendo el papel del marketing a la hora de influir en el comportamiento de los consumidores, el informe pide que se prohíban las vallas publicitarias y la publicidad general susceptible de atraer a un público joven. También se haría más estricto el control de edad en los sitios web sobre cannabis para garantizar que los menores sólo tengan un acceso limitado a estos sitios.
Daniele Piomelli, coautor del informe y director del Centro para el Estudio del Cannabis de la UC Irvine, subrayó que los cambios propuestos podrían tener importantes beneficios para la salud pública.
«Es esencial limitar la exposición […] para reducir el riesgo de daños a largo plazo para la salud», subrayó Daniele Piomelli, en particular para los jóvenes y las poblaciones vulnerables.
Financiación de campañas de salud pública
El informe recomienda invertir al menos 10 millones de dólares procedentes de la recaudación del impuesto sobre el cannabis en campañas de salud pública.
Estas campañas informarían a los consumidores de los riesgos asociados al consumo de cannabis de alta potencia, incluidos los efectos sobre la salud mental, el embarazo y la conducción.
Los investigadores también destacan la necesidad de vigilar y notificar los efectos adversos del cannabis sobre la salud, en particular los casos de urgencia relacionados con el consumo de cannabis de alta potencia.
Limitar la influencia de los productos de cáñamo no regulados
El mercado no regulado del cáñamo en California ha visto un flujo de productos que contienen potentes cannabinoides psicotrópicos como el Delta-8 THC y el THC-P.
Estos productos, a menudo comercializados como artículos de conveniencia, pueden venderse legalmente a menores en tiendas de conveniencia.
Reconociendo esta laguna, el gobernador Gavin Newsom introdujo recientemente una normativa de emergencia para prohibir los productos intoxicantes de cáñamo con contenido detectable de THC. Esta medida complementa la insistencia del informe en la necesidad urgente de una normativa coherente que limite el acceso de los jóvenes a los productos psicoactivos del cáñamo.