Introducción a las extracciones de cannabis

La extracción es una técnica de la que se habla cada vez más en el mundo del cannabis.

Se han desarrollado diferentes métodos de extracción en todo el mundo. La gente utilizaba los extractos para hacer tintes, perfumes, aromas y medicinas.

Si estás leyendo esta guía y te interesa la extracción de cannabis, términos como tricomas, BHO, BubbleHash o 710 no deberían tener secretos para ti. Si no es así, ¡vaya aquí! Para los demás, empezamos con la música:

Se presenta en forma de Shatter, Wax, BubbleHash, Ice-O-Lator o Rosin. ¿De dónde procede la extracción? ¿Es peligroso? ¿Sólo se extrae del Cannabis? ¡Te lo contamos todo!

¿Desde cuándo se utiliza este proceso?

El hombre lleva varios milenios descubriendo los beneficios de los extractos vegetales. Las primeras extracciones se hacían por fermentación alcohólica en infusión, maceración o decocción. Incluso hoy, a pesar de los muchos avances que se han producido, el conocimiento de las técnicas y el saber hacer siguen siendo un elemento esencial para obtener una extracción de calidad.

¿Cuáles son los principales métodos de extracción?

Descubramos los principales métodos de extracción y su relación con la extracción de Cannabis:

Filtración: Esta técnica se remonta a la prehistoria y, como su nombre indica, filtra las «impurezas». En la práctica es similar a la producción de hachís / hachís de burbujas. Una vez cortadas y secadas las flores, se tamizan contra tamices de diferentes diámetros para obtener la calidad deseada. ¡Seguro que ya has hecho extracciones por filtración con tus molinillos de 4 partes!

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Prensado (o RosinTech): Haces extracciones casi todos los días. Ya sea para hacer tu zumo de naranja fresco por la mañana o para sacar el aire de tu hoja cuando enrolles un porro y estés a punto de pegarlo. En la práctica, esta técnica se llama Rosin Tech. Consiste en presionar las flores de cannabis entre dos placas a una presión y temperatura suficientes para extraer la famosa colofonia. Una simple plancha y un poco de papel de hornear es suficiente, aunque una verdadera prensa es mucho mejor..

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Decocción, infusión, maceración: Todas estas técnicas son muy utilizadas por tus abuelos. Ya sea para hacer mermelada, té o la pera casera del abuelo, todo se utiliza. En la práctica, utilizamos estas técnicas para hacer mantequilla de Marrakech, rones arreglados o incluso para hacer nuestro propio e-líquido.

Hidrodestilación: Esta técnica se utiliza desde el antiguo Egipto y permite recuperar los aceites esenciales de la planta por evaporación. En la práctica, no se utiliza mucho en el mundo cannábico. En la industria se utiliza MUCHO, casi todos los aceites esenciales se extraen de este modo.

Extracción con disolventes: Este tipo de extracción es mucho más reciente, se remonta al siglo XIX y se utilizó para superar los problemas asociados a la imposibilidad de extraer determinados concentrados en el agua. Esta práctica apareció hace unos cuarenta años en el mundo del cannabis. Si en aquella época era muy marginal, hoy, con la legalización en muchos estados americanos, la extracción con disolventes está en pleno BOOM.

En EE.UU., la extracción es ya la mayor rama de la industria del cannabis gracias a todos los posibles usos.

Muchas marcas ofrecen sistemas de extracción de todo tipo y tamaño. Para estos extractores tienes que elegir el gas de extracción. El disolvente de extracción más común es el butano (el mismo gas de los encendedores). En los últimos años también ha aparecido el DME (éter dietílico) para el público en general. Un gas que ya se utiliza en muchos de tus aerosoles y que se emplea en la industria farmacéutica y alimentaria.

El último proceso de esta extracción es el purgado de tu producto. Una vez mezclado tu concentrado con el gas, tienes que purgarlo para que sea apto para el consumo. Este es un punto esencial y lo trataremos en detalle en una próxima guía.

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Nos detenemos deliberadamente en esta lista porque estos son los métodos con los que te encontrarás más habitualmente. Ahora que estás más familiarizado con los procesos por los que se pueden hacer extracciones, ¡vamos a ver qué se puede extraer!

¿Qué se puede extraer?

En general, el término extracción abarca todas las técnicas de aislamiento de compuestos aromáticos o farmacológicos. Una extracción también puede definirse con el conocido término de aceite esencial. Los aceites esenciales se han utilizado desde el principio de los tiempos por sus propiedades estimulantes, en particular sobre las actividades celulares de las plantas y los animales, o inhibidoras, por ejemplo sobre los microbios (desinfección).

Los trabajos recientes sobre el aceite de cáñamo y sus propiedades antibacterianas son muy prometedores y sugieren una multitud de aplicaciones médicas. Muchas plantas que contienen aceites ricos en moléculas activas se utilizan con fines terapéuticos. Las virtudes de la menta, la salvia, el romero y muchas otras se conocen desde la noche de los tiempos y ya no se pueden negar.

Las técnicas desarrolladas recientemente en la industria del cannabis medicinal y recreativo pueden reproducirse en plantas con fines culinarios o con compuestos aromáticos como ciertos lípidos.

El romero es un buen ejemplo, su aceite esencial puede extraerse fácilmente con disolventes no acuosos, como el éter dimetílico, y utilizarse para el consumo humano sin ningún peligro. Las sumidades floridas de Helichrysum también están atrayendo la atención de la comunidad científica por la posible presencia de terpenos «anticancerígenos». El aceite de esta flor extraído mediante CO2 supercrítico contiene monoterpenos, sesquiterpenos y acetato de nerilo. Apodado «aceite de bóxer» y prescrito para el tratamiento de los hematomas, esta extracción tiene propiedades antioxidantes, antibacterianas y antifúngicas.

¿Por qué extraer?

La mayoría de las personas que no tienen conocimiento de la extracción te dirán a menudo lo mismo:

• ¡Es una droga dura!
• ¡Puedes morir por ello!
• ¿Por qué haces esto?

Para responder a estas preguntas, te remitimos al artículo sobre Fantomas y Louis de Funes, que te dará muchas respuestas.

Si no quieres salir de esta página, aquí está la nuestra:

Las extracciones permiten extraer de la planta sólo las moléculas deseadas. No hay producto más «puro» que una extracción, porque elimina todas las partes superfluas de la planta. Es la quintaesencia del producto.

Las extracciones forman parte de tu vida cotidiana:

• Medicación
• Alimentos (Pasta de tomate / Puré deshidratado / Aceites …)
• Bebidas (jarabes / licores)

Ya sea una extracción por infusión, maceración, evaporación, con o sin disolventes… Estás rodeado de extractos todos los días.

Por lo tanto, ¡las extracciones son indispensables! Aunque sólo sea por la industria farmacéutica, que sólo «vive» porque no sabes hacer tus propias extracciones y tus propios medicamentos. De ahí el problema de la legalización del cannabis para la industria farmacéutica.

Medidas de seguridad que hay que tomar durante una extracción

Cualquier extracción requiere que se tomen medidas de seguridad. Aunque las técnicas de extracción sin disolventes son relativamente seguras, es importante estar en buenas condiciones cuando se utiliza una prensa hidráulica con placas calientes.Extracción de cannabis

En este apartado hablaremos principalmente de las precauciones de seguridad que hay que tomar al extraer con disolventes. Cuando haces pasar gas por tu materia prima, en cierto modo estás «desengrasando» la planta de su resina. Es en su forma líquida donde se aprovecha el poder del disolvente para la extracción y concentración de moléculas (como el THC, el CBD…).

A la presión atmosférica ambiente, el butano o Di Metil Éter (DME) se expande y se convierte en gas casi instantáneamente. Esto significa que cuando realices una extracción en circuito abierto, el gas desencadenará una reacción endotérmica que congelará instantáneamente el tubo. Ten cuidado con los dedos, usa guantes y evita el contacto con el metal durante esta fase (de lo contrario, te atascarás…)

Ten siempre presente que no debes estar en un entorno cerrado durante tus extracciones. No se deben encender llamas al manipular las botellas y, en general, NO SE DEBEN ENCENDER LLAMAS desde el principio hasta el final de tu RUN (sesión de extracción). Entraremos en más detalles sobre las medidas de seguridad en nuestra primera guía sobre la extracción con disolventes, pero si hay algo que debes tener en cuenta es :

Tu vida es preciosa. Si quieres extraer, nadie puede impedírtelo, pero cuanto más seguro trabajes, mejor podrás realizar/dominar la operación de extracción. El conocimiento y el dominio son elementos clave para obtener un producto perfecto.

Esta guía está llegando a su fin y abre las puertas a una serie de guías que se centrarán inicialmente en la extracción con disolventes. También estamos trabajando en las extracciones «sin disolventes», que se irán añadiendo a esta serie a medida que avancemos. Muchas gracias a Hempulse por su ayuda y sus valiosos conocimientos durante la redacción de esta guía.