En 2023, Portugal demostró ser un importante hub de cannabis medicinal en Europa, enviando 11 toneladas al extranjero. En cambio, el mercado nacional sigue siendo complicado, con apenas 17 kilogramos vendidos en farmacias. A pesar de pionero de la legalización médica en 2018, el país se enfrenta a un acceso restringido y a una persistente dependencia del mercado negro para los pacientes que lo necesitan.
Sin acceso al cannabis medicinal en Portugal
A pesar de los primeros pasos hacia la legalización, el acceso al cannabis medicinal sigue siendo más que limitado en Portugal. Sólo un producto, la flor seca importada de Tilray, estaba disponible en 2023, destinado a un número limitado de pacientes que sufren patologías específicas y carecen de alternativas farmacéuticas. El desorbitado precio de 150 euros por un paquete de 15 gramos desalentó aún más la adopción local, empujando a los pacientes hacia fuentes ilícitas.
Sin embargo, el país se ha convertido en un hervidero de producción e importación/exportación de cannabis medicinal, sobre todo a destinos como Alemania, Polonia y Australia, lo que subraya su potencial dentro del mercado mundial. Sólo en el primer semestre de 2023, las exportaciones superaron las 5,4 toneladas, un prometedor indicador de la trayectoria de crecimiento de la industria, que ya existía en 2021. Este éxito contrasta obviamente con las débiles ventas nacionales y la situación de los pacientes portugueses.
Somai Pharmaceuticals, un actor clave desde 2019, planea desempeñar un papel de liderazgo en cannabis medicinal, aunque actualmente no tiene oferta en Portugal. Su fundador, Michael Sassano, anticipa la penetración en el mercado, pero reconoce la brecha de escala en comparación con los principales actores, como Australia y Alemania.
Carla Dias, presidenta del Observatorio Portugués del Cannabis, aboga por un mayor acceso. La reciente aprobación de tres nuevos productos de cannabis medicinal en Portugal ya es una señal de progreso. Además, una iniciativa ciudadana de la Comisión Europea pretende mejorar la regulación, prometiendo posibles cambios a nivel de la UE.