Grandes marcas de alimentación demandan a los traficantes por falsificación

Una red francesa de traficantes de cannabis está siendo procesada por, entre otras cosas, apropiarse de marcas famosas para comercializar sus productos.

Haribeuh y Nutellhash

Este grupo de traficantes vendía sus productos en sobres que parodiaban la identidad visual de conocidas empresas. Los envases, etiquetados con nombres como «Haribeuh», «Nutellhash» y «Shitkers», imitaban el diseño de aperitivos tan conocidos como Snickers y Nutella.

Según la acusación, este enfoque dio al grupo una ventaja competitiva en el comercio de cannabis, aumentando las ventas y los beneficios gracias al atractivo de las marcas icónicas.

Quince empresas, entre ellas Mars, Johnson & Johnson y Ferrero, han presentado una demanda civil contra la red, alegando daños a la reputación de sus marcas e infracción de sus derechos de propiedad intelectual. Al parecer, el envase fue creado por una agencia de marketing clandestina llamada Pochette Surprise, que trabajó en estrecha colaboración con el establecimiento Caliterter, situado en Villejuif, al sur de París.

Durante el juicio, el abogado de Haribo destacó la «ingenuidad de los acusados», reconociendo las sofisticadas técnicas de marketing utilizadas en la operación cannábica. «Llegaron a utilizar la reputación de Haribo en la venta de estupefacientes», remarcó, al tiempo que se refirió con humor a sí mismo como el abogado de Haribeuh antes de corregir su lapsus linguae. A pesar de este momento de frivolidad, no se perdió de vista la gravedad del caso, y el fiscal recordó los efectos nocivos del narcotráfico y su contribución a una actividad delictiva más amplia.

Las autoridades estiman que la red de cannabis generó más de 860.000 euros en ingresos utilizando marcas falsificadas. El responsable de Pochette Surprise, un residente español que no compareció ante el tribunal, se enfrenta a una pena de cuatro años de prisión. Se han recomendado penas menores para otros implicados en la red, incluidos los responsables de producir material promocional, en algunos de los cuales aparecían personajes conocidos de los Simpsons

La fiscalía argumentó que esta actividad ilícita es más que una simple operación de marketing inteligente. Representa una amenaza significativa para la sociedad, y su impacto en los jóvenes es especialmente preocupante.

«El tráfico de drogas no es un juego», subrayó el fiscal, haciendo hincapié en los peligros de esta empresa delictiva.

Una red bien organizada

El tráfico de drogas de Caliterter, ubicado place du Moutier en Villejuif, presentaba un modelo organizativo muy estructurado. Según los investigadores, la red se gestionaba como una empresa legítima, con una jerarquía clara en la que participaban un CEO, un equipo directivo, logistas y trabajadores sobre el terreno. A pesar de las numerosas detenciones, incluidos varios miembros ya condenados en juicios anteriores, el grupo siguió operando.

El presunto líder de la operación, conocido alternativamente como «Kirikou» o «Remontada Max94«, fue detenido en una importante redada en 2022. Sin embargo, las autoridades creen que siguió dirigiendo la red mientras estuvo encarcelado en la prisión de Meaux. El fiscal ha solicitado 10 años de prisión y 50.000 euros de multa para el presunto líder, mientras que sus lugartenientes se enfrentan a penas de hasta 8 años de cárcel.

Se espera que el juicio concluya en breve y que el tribunal se disponga a emitir su veredicto sobre la suerte de los acusados.

En Estados Unidos, algunas empresas de cannabis legal han también tenido que cambiar los nombres de algunas de sus variedades tras las demandas de marcas más conocidas: la Girl Scout Cookies -ahora GSC-, la Gorilla Glue -ahora GG4– o la Zkittlez ahora The Original Z.