La semana pasada, los medios de comunicación se hicieron eco de un estudio canadiense en el que se afirmaba que «el cannabis es más perjudicial para los pulmones que el tabaco».
Pero el estudio no dice eso. Esto es lo que el estudio encontró realmente.
No se incluyó a ningún fumador de cannabis
Regla número uno sobre los estudios publicados recientemente: Lea usted mismo los resultados. A menos que se indique claramente la fuente de la información, sea escéptico respecto a las conclusiones extraídas de las nuevas investigaciones hasta que las revise usted mismo.
En este caso, un rápido vistazo al estudio en cuestión -«Chest CT Findings in Marijuana Smokers, publicado el 15 de noviembre en la revista Radiology – revela un problema importante.
Los hallazgos de la radiografía de tórax no eran de fumadores de cannabis. Eran de fumadores de tabaco que también fumaban cannabis. No se incluyó en el estudio a ningún fumador que sólo fumara cannabis.
El estudio concluye, además, que la forma en que se estableció «limita nuestra capacidad de sacar conclusiones sólidas».
Cómo se realizó el estudio
El autor principal del estudio, un radiólogo de diagnóstico del Hospital de Ottawa (Ontario, Canadá), escribió: «El objetivo de este estudio era utilizar las tomografías computarizadas de tórax para investigar los efectos del consumo de cannabis en los pulmones. Intentamos determinar si había alguna secuela identificable en las imágenes de TC de tórax, incluyendo enfisema y signos de inflamación de las vías respiratorias.»
Para crear los grupos de prueba, los investigadores revisaron las historias clínicas de los pacientes atendidos entre 2005 y 2020. El estudio dice: «Se identificaron 33 pacientes exclusivamente fumadores con un TAC de tórax realizado entre abril y junio de 2019.»
«Si se identificaba el consumo de cannabis, el paciente era excluido» del grupo de fumadores de tabaco, «se añadía al grupo de fumadores de cannabis y se seleccionaba un nuevo paciente»
En otras palabras, el estudio no comparó a los fumadores de tabaco con los de cannabis. En cambio, los investigadores compararon a los fumadores de tabaco sólo con los fumadores de tabaco que también fumaban cannabis. No había ningún grupo que fumara cannabis pero no tabaco.
No es buena idea fumar cigarrillos y cannabis
Por lo tanto, el estudio no concluyó que «el cannabis pueda perjudicar a los fumadores más que los cigarrillos solos». Pero esa fue la conclusión que recogieron varios sitios.
De hecho, los autores del estudio descubrieron que no es saludable fumar tanto tabaco como cannabis. «Los autores del estudio encontraron un engrosamiento de los bronquios en el 64% de los fumadores de cannabis en comparación con el 42% de los fumadores que sólo fumaban tabaco, así como una condición que lleva a la acumulación excesiva de moco en el 23% de los fumadores de cannabis en comparación con el 6% de los fumadores que sólo fumaban tabaco.»
No está claro si esto se aplica más a los que fuman cigarrillos y cannabis por separado, o a los que mezclan el tabaco con el cannabis.
¿Cuáles son las conclusiones de los estudios anteriores?
Un Estudio de 2007 encontró una relación entre el enfisema y otros problemas pulmonares en fumadores y no fumadores de cannabis, pero el tabaco o los cigarrillos no se incluyeron en la investigación.
Otro estudio realizado en 2012 por la Universidad de Alabama en Birmingham (UAB) concluyó que «el humo de la marihuana (no es) tan dañino para los pulmones como el del cigarrillo», con un tamaño de muestra mucho mayor y una metodología más rigurosa.
«Los datos mostraron que incluso hasta niveles moderadamente altos de uso -un porro al día durante siete años- no hay evidencia de disminución del flujo de aire o de los volúmenes pulmonares»
El estudio de la UAB descubrió: «En los niveles de exposición al cannabis que se observan habitualmente en los estadounidenses, el consumo ocasional de cannabis se asoció a un aumento del flujo de aire pulmonar y de la capacidad pulmonar», dijo el investigador principal del estudio. No obstante, «estos aumentos no fueron grandes, pero sí estadísticamente significativos», según el estudio publicado.
Este estudio reconoce que la exposición al humo durante toda la vida puede seguir siendo perjudicial, pero también que no es fácil encontrar consumidores habituales de cannabis a largo plazo para los estudios, dada la incierta situación legal de la planta.
El estudio de la UAB fue financiado por el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre. Fue un proyecto de investigación a largo plazo en el que participaron más de 5.000 hombres y mujeres blancos y negros de Birmingham, Chicago, Minneapolis y Oakland, diseñado para examinar el desarrollo y los determinantes de las enfermedades cardiovasculares y sus factores de riesgo. Los participantes fueron reclutados cuando tenían entre 18 y 30 años y fueron seguidos desde 1985 hasta 2006.
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