Fiyi apuesta por el cannabis medicinal para sus exportaciones

El gobierno de Fiyi busca fuentes alternativas de ingresos y la creación de una industria de cannabis medicinal está en su lista de opciones potenciales para sustituir a una industria turística duramente golpeada por el COVID.

«Depender únicamente del turismo no es sostenible para nuestra economía», declaró el Viceprimer Ministro Manoa Kamikamica. «Tenemos que explorar nuevas formas de generar ingresos y diversificar nuestra economía. El cultivo de cannabis medicinal es un campo prometedor que estamos estudiando».

El Viceprimer Ministro Manoa Kamikamica dejó claro que esta empresa no se llevaría a cabo en un entorno no regulado y que la legalización del cannabis recreativo no estaba en la agenda. Además, el cannabis medicinal cultivado en el marco de esta iniciativa no se destinaría al país.

«Es esencial entender que esta actividad estará estrictamente regulada y confinada a instalaciones seguras. No habrá venta ni comercialización local; los productos se cosecharán, procesarán y exportarán.»

Esta perspectiva ya ha atraído la atención de las empresas farmacéuticas, una de las cuales también está interesada en el potencial de exportación de la medicina tradicional fiyiana (Wai Vaka Viti) a los mercados internacionales.

«Esta iniciativa va más allá de la simple generación de ingresos; es una oportunidad para crear empleo, fortalecer nuestra economía y mejorar potencialmente la vida de los necesitados», dijo el Sr. Kamikamica.

Uno de los próximos pasos consistirá en celebrar consultas a escala nacional para que los ciudadanos del país puedan hacer aportaciones que ayuden a perfilar el futuro del cannabis medicinal en Fiyi.

En noticias relacionadas, hasta el año pasado no se introdujeron cambios legislativos que permitieran la importación, posesión, cultivo, venta y suministro de cáñamo industrial en Fiyi, definido como Cannabis con una concentración de THC no superior al 1%.

El presidente de Fiyi, Wiliame Katonivere, ha apoyado firmemente explorar el potencial del cáñamo y afirmó en 2021 que el país «no debe dudar» en aprovechar sus beneficios económicos.