La regulación del cannabis no narcótico avanza más rápido en la Polinesia Francesa que en la Francia continental.
El marco legislativo, defendido por Moetai Brotherson, pretende facilitar el acceso legal a los productos de cáñamo no narcótico, incluidas las variedades y los productos con menos del 0,3% de THC por el momento. Se han publicado en el Diario Oficial varios decretos que allanan el camino para el cultivo, la importación y el consumo controlados de productos derivados del cáñamo.
Principales decretos publicados en el Diario Oficial
Uno de los decretos publicados recientemente define el método para la determinación cuantitativa de 9-THC y cannabidiol (CBD) en variedades de flores de Cannabis sativa.
Otro decreto se refiere a las normas de seguridad y discreción visual exigidas para el cultivo de Cannabis sin propiedades estupefacientes. Según el texto, estas normas tienen por objeto «evitar el desvío, asegurar la trazabilidad y garantizar la seguridad de las instalaciones de producción y almacenamiento con el fin de proteger a las poblaciones vulnerables y salvaguardar la seguridad pública».
El decreto especifica que los lugares de cultivo, así como las instalaciones de secado y almacenamiento, deben estar cerrados, claramente delimitados y asegurados para impedir el acceso no autorizado. Además, los productores de cannabis, que deben ser residentes desde hace más de 10 años, deben mantener una documentación rigurosa sobre el origen y el uso de las semillas para garantizar la transparencia y evitar actividades ilegales.
Un tercer decreto describe los productos de cannabis autorizados, especificando qué partes de la planta pueden utilizarse y las obligaciones impuestas a los importadores. Entre los productos autorizados figuran los productos para fumar, que entrarán en la legislación sobre el tabaco, los cosméticos, las infusiones, los productos a base de semillas y los suplementos dietéticos.
El proyecto de ley, propuesto inicialmente por los Ministerios de Sanidad y Agricultura,establece así una base jurídica para el desarrollo de una industria del cáñamo y del cannabis medicinal en la Polinesia Francesa, al tiempo que garantiza el cumplimiento de la normativa francesa e internacional.