El avance de Alemania hacia la legalización del cannabis se ha topado con un nuevo obstáculo: la votación prevista para mediados de diciembre ha sido aplazada, a pesar de que los partidos de la coalición y el Ministerio de Sanidad alcanzaron hace unos días un acuerdo sobre algunos de los puntos más conflictivos.
Al parecer, han surgido muchas resistencias incluso dentro del SPD, a pesar de ser un miembro de la coalición que ha llevado el proyecto de legalización desde el principio, según informa Der Spiegel. Las fuentes apuntan a que, a pesar de que Karl Lauterbach llevó el proyecto de legalización, nunca se llegó a un acuerdo con los políticos internos del grupo parlamentario. Ante la posibilidad de un rechazo total de la propuesta, ésta fue retirada de la votación.
Tensiones y preocupaciones
El inesperado retraso de la votación sobre la legalización del cannabis ha levantado ampollas, y parece que las tensiones internas en el seno de la «coalición del semáforo» en el poder han contribuido al revés.
El SPD, los Verdes y el Partido Democrático Libre (FDP) están enfrentados por cuestiones presupuestarias y preocupaciones que no se han abordado suficientemente. El secretario general del SPD, Kevin Kühnert, subrayó la necesidad de aclarar las cuestiones presupuestarias antes de proceder a la votación sobre la legalización del cannabis.
Algunos miembros del SPD expresaron sus reservas, citando deficiencias en la lucha contra el crimen organizado y disposiciones insuficientes para la protección de los menores.
Los artífices del proyecto de ley ya han hecho concesiones en respuesta a las preocupaciones expresadas. Los cambios incluyen la modificación de las restricciones de distancia para el consumo de cannabis cerca de escuelas y otras zonas sensibles. El requisito original de 200 metros se cambió para estar «a la vista» de las entradas a dichos edificios.
Además, la pertenencia a una asociación de cultivadores exigirá ahora un mínimo de seis meses de residencia en Alemania, a petición de Francia. La cantidad permitida de cannabis en el hogar aumentará a 50 gramos, en respuesta a las críticas de que el límite original de 25 gramos era insuficiente dado el rendimiento del cultivo de tres plantas. La posesión pública sigue limitada a 25 gramos.
La industria en el punto de partida
La industria del cannabis, tanto nacional como internacional, ha estado siguiendo de cerca la evolución del panorama regulador alemán. Las empresas cannábicas que cotizan en bolsa, como la canadiense Tilray y la estadounidense Curaleaf, tienen la vista puesta en el mercado alemán, pero tendrán que esperar su momento.
Curaleaf, por ejemplo, adquirió el año pasado una participación mayoritaria en el productor y distribuidor alemán Four 20 Pharma, y el retraso en la legislación podría afectar a sus planes.
A principios de este año, Alemania se apartó de su plan original de legalizar el cannabis recreativo en todo el país, optando en su lugar por un enfoque en dos fases con oportunidades comerciales limitadas. El plan revisado incluye la despenalización del cannabis, el cultivo doméstico y la posesión a partir del 1 de abril de 2024, con la introducción de los clubes de cannabis prevista para el verano siguiente.
El fracaso a la hora de aprobar la legislación este año ha suscitado preocupación, pero algunos políticos, como Dirk Heidenblut, del Partido Socialdemócrata (SPD), siguen siendo optimistas y creen que el lanzamiento en abril de 2024 sigue siendo plausible si se celebra una votación a finales de enero. De momento, el aplazamiento de la votación no pone esto en duda.