Según un decreto promulgado este mes por el líder talibán, queda prohibido el cultivo de cannabis en todo el país, algo que ya ocurría. Pero sobre todo, en caso de infracción, la plantación será destruida y los infractores serán castigados de acuerdo con las normas de la sharia.
«El cultivo de cannabis está totalmente prohibido en todo el país y si alguien lo cultiva, la plantación será destruida. También se ha ordenado a los tribunales que castiguen a los infractores de acuerdo con las leyes de la sharia», declaró el dirigente talibán Hibatullah Akhundzada.
¿Cuáles son exactamente las penas de la sharia? Los «delitos» de apostasía, revuelta, adulterio, calumnia y alcohol se castigan con la amputación de manos y pies, la flagelación y/o la muerte. Estas penas también se aplican a las mujeres que llevan el cuerpo y el cabello al descubierto.
Afganistán, productor mundial de cannabis y opio
El cannabis es uno de los cultivos más producidos por los agricultores del país y Afganistán se convirtió en el primer proveedor en 2010, según Naciones Unidas. El país es también desde hace tiempo uno de los mayores productores mundiales de opio, ingrediente básico de la heroína, y de cannabis, que se cultiva a gran escala en la mitad de sus provincias.
Según un informe de 2010 de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), en Afganistán se cultivan anualmente entre 10.000 y 24.000 hectáreas de cannabis, con cultivos importantes en 17 de las 34 provincias del país.
Se cree que el comercio ilegal de opio y cannabis alimentó a los talibanes antes de que llegaran al poder en 2021, tras 20 años de insurgencia contra las fuerzas estadounidenses que invadieron el país tras los atentados del 11 de septiembre de 2001.
Los Talibanes afirmaron haber establecido una asociación con una empresa de cannabis medicinal en 2021.
El director de prensa de los talibanes, Qari Saeed Khosty, dijo entonces que se había firmado un contrato entre el gobierno afgano y una empresa de cannabis llamada Cpharm para establecer una instalación de producción de cannabis de 450 millones de dólares en Afganistán, y que la instalación estaría «operativa en los próximos días».
