El cannabis en Alemania
Quick Hit agosto 2022: lo que nos hemos perdido en las últimas semanas
Como habrán notado los consumidores habituales de newsweed, hemos estado en pausa durante las últimas dos semanas. Pero como las noticias no se hacen esperar, he aquí un resumen de lo que ha sucedido en el ínterin en el Planeta Cannabis.
Francia
31 senadores del grupo Socialista, Ecologista y Republicano (SER) han firmado una tribuna pidiendo la legalización del cannabis. En represalia, el grupo republicano envió sus cuchillos más afilados a la televisión para intentar explicar que era una mala idea.
Othman Nasrou, vicepresidente de la región de Île-de-France, argumentó de todos modos que la legalización no debería hacerse porque «el 60% del cannabis sigue procediendo del mercado negro» en Canadá, un argumento que suele utilizarse para demostrar que la legalización funciona. Si nos lee Othman, es más bien un 60% de cannabis legal.
A continuación, Patrick Karam, también vicepresidente del consejo regional de Île-de-France, acudió a Cnews para justificar su rechazo a una legalización que levantaría «el tabú moral ligado a lo legal». ¿El mismo tabú moral que hace que Francia sea el mayor consumidor de cannabis de Europa? Perra, por favor.
Europa
El ministro de Sanidad alemán, Karl Lauterbach, ha admitido que ha probado el cannabis y que ahora está a favor de la legalización tras haberse opuesto a ella. En una entrevista, dio algunas pistas sobre la legalización del cannabis en Alemania: más de 5.000 millones de euros al año de ingresos fiscales potenciales, un planteamiento «ambicioso» en consonancia con la legislación europea, el cannabis estará probablemente disponible en tiendas especializadas y también en farmacias. Se espera que la redacción de la ley esté terminada para su presentación en el Bundestag antes de finales de este año, para que entre en vigor a principios de 2023 y se empiece a vender como muy pronto en 2024.
Los británicos apoyan ahora mayoritariamente un enfoque de reducción de daños, como el de Portugal, que trata la adicción como una enfermedad mental y no como un delito, en una reciente encuesta de YouGov.
Los daneses también quieren legalizar y dejar que el Estado se encargue de la venta de cannabis.
Estados Unidos
Una organización antidroga estadounidense, la Community Anti-Drug Coalitions of America (CADCA), pedía a sus simpatizantes que se opusieran a un proyecto de ley federal de legalización del cannabis, la Cannabis Administration and Opportunity Act (CAOA). Lo más sorprendente siguen siendo los patrocinadores de esta organización sin ánimo de lucro: Purdue Pharma, Pfizer, Barclays, Goldman Sachs, Deutsche Bank, Deloitte, Krispy Kreme, Johnson and Johnson o la NFL que está haciendo sus propios estudios actualmente sobre el uso del cannabis para el manejo del dolor en los atletas. Algunas de estas empresas se benefician activamente de la industria del cannabis en Canadá, al tiempo que hacen donaciones a una organización que anima a los senadores estadounidenses a votar en contra de la legalización. Desde entonces, CADCA ha eliminado la página de «patrocinadores».
Here’s a visual version pic.twitter.com/pnrU9ffUDI
— Hazey Taughtme™️ (@Hazeytaughtme) August 4, 2022
Un proyecto de ley, la Ley de Expansión de la Investigación sobre la Marihuana Médica y el Cannabidiol, ha sido aprobada por la Cámara de Representantes y pretende ampliar la investigación sobre el uso médico del cannabis. Facilitaría la aprobación de diversas instituciones sanitarias o de investigación para «fabricar, distribuir, dispensar o poseer cannabis o cannabidiol (CBD) con fines de investigación médica».
Las universidades de los estados que han legalizado el cannabis han visto un aumento de las solicitudes «sin que parezca haber un descenso en la calidad de los estudiantes solicitantes».
La regulación del cannabis en Nueva York está tardando demasiado. Sin embargo, la venta de cannabis ya está abierta, con camiones que venden hierba en la calle. La policía acaba de incautar 20 de ellos.
Brittney Griner, la jugadora profesional de baloncesto que juega en Rusia y cuya maleta contenía un cartucho de cannabis para fumar, fue condenada a nueve años de prisión. Algunos apuntan a la hipocresía del gobierno de Estados Unidos, que, mientras considera ridícula la sentencia de Brittney Griner, continúa encarcelando a sus ciudadanos, especialmente a los negros, por el cannabis. La Dakota del Norte votará a favor (o en contra) de la legalización del cannabis este noviembre después de que una iniciativa popular recoja suficientes firmas.
SQDC, que comercializa cannabis y productos derivados en Quebec, ha lanzado 3 nuevos comestibles: remolacha, coliflor e higos secos infundidos con THC/CBD. Cada bocado contiene 2,5 mg de THC y 5 mg de CBD. 6,90 CAD por 4.
Los productores canadienses de cannabis legal destruyeron en 2021 la cifra récord de 425 millones de gramos de cannabis seco sin envasar, superando con creces la cantidad que pudieron vender. Además de la destrucción de cannabis seco sin envasar, en 2021 se enviaron a destruir más de 7 millones de productos de cannabis envasados en todo el país, según datos de Health Canada. Canopy Growth perdió 2.000 millones de dólares vendiendo cannabis este trimestre.
El monopolio de la Ontario Cannabis Store, la única autorizada a vender cannabis en línea y al por mayor en Ontario, está comenzando a irritarse. Hay que decir que el negocio es bueno: la organización fija los precios de compra a los productores, se lleva un margen del 42% y luego revende a las tiendas, que también tendrán que añadir un margen para intentar vivir. Este monopolio de beneficios está ahogando la innovación y estrangulando lentamente la nueva industria del cannabis, especialmente a sus pequeños operadores y minoristas independientes. Como guinda del pastel, tras un ataque informático a uno de sus servidores, se vio obligada a suspender sus entregas de cannabis a las tiendas durante unos diez días.
Gustavo Petro, nuevo presidente de Colombia, pide el fin de la guerra contra las drogas: «Es hora de adoptar una nueva convención internacional que reconozca que la guerra contra las drogas ha fracasado». El país se plantea ahora despenalizar el consumo de cocaína y controlar públicamente la producción para acabar con el dinero de los cárteles. Algunas empresas estadounidenses ya están interesadas en el negocio de las hojas de coca «decocaína», como las que se utilizan para la Coca-Cola pero cuya producción está hasta ahora muy regulada. El mercado tailandés del cannabis podría tener ya un valor de 1.200 millones de euros en 2025. El hecho es que la despenalización introducida no es una legalización por el momento. El gobierno ha reiterado que la venta de cannabis es ilegal en Khao San Road, una de las avenidas turísticas de Bangkok, a pesar de que al menos cuatro tiendas de cannabis se encuentran allí. Sin embargo, la policía sólo puede impedir que se fume en público. También acaban de abrirse varias tiendas de hierba en Pattaya, Pukhet o Ko Pha Ngan.
Tailandia, de nuevo, está dando los primeros pasos para despenalizar el consumo personal de drogas, adoptando cantidades límite (1,5 g de metanfetamina, 300 mg de heroína, 600 mg de cocaína). La posesión de una cantidad inferior al umbral puede dar lugar a la remisión a un programa de tratamiento en lugar de al enjuiciamiento. La pregunta sigue siendo: ¿qué «programa de tratamiento»?
Malasia quiere seguir el ejemplo de Tailandia en la promoción del uso médico del cannabis. El ministro de Sanidad de Tailandia dijo que organizaría un viaje para que su homólogo malasio estudiara cómo se puede utilizar el cannabis con fines médicos. Los históricos cultivadores de cannabis de Sudáfrica están excluidos mecánicamente de los planes de legalización del cannabis.
31 jóvenes de entre 12 y 25 años con un trastorno de ansiedad y sin mejoría clínica a pesar del tratamiento con terapia cognitivo-conductual y/o antidepresivos utilizaron CBD durante 12 semanas y hasta 800 miligramos al día. La ansiedad disminuyó de media un 42,6%.
Un estudio realizado por la Universidad del Estado de Washington descubrió un descenso del 37% en las denuncias de intoxicación por cannabinoides sintéticos ilícitos en los estados con cannabis legal, en comparación con los estados con políticas restrictivas. Un estudio canadiense ha descubierto que la legalización del cannabis no se asocia a un aumento de la psicosis o la esquizofrenia.
Un estudio español, realizado por GH Medical entre otros, señaló que el uso de 65 mg de THC era menos embriagador cuando se combinaba con CBD en una proporción de 2:1 que cuando se tomaba solo.
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