El consumo de cannabis entre los adolescentes ha descendido un 20% en 10 años en Estados Unidos

Los datos de encuestas gubernamentales publicados por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. (HHS) indican un notable descenso del consumo de cannabis entre los adolescentes durante la última década.

Contrariamente a los temores de que la legalización del cannabis para adultos provocará un aumento del consumo entre los adolescentes, los datos sugieren la tendencia contraria.

Significativo descenso del consumo de cannabis entre los adolescentes

Las últimas conclusiones de la Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias (SAMHSA), como parte de la Encuesta Nacional sobre Consumo de Drogas y Salud (NSDUH), revelan un descenso significativo del consumo de cannabis entre los adolescentes de 12 a 17 años en Estados Unidos.

Según los datos de la NSDUH, la proporción de adolescentes que han probado alguna vez el cannabis descendió un 18% entre 2014 y 2023. Del mismo modo, el número de adolescentes que declaran haber consumido cannabis en el último año descendió un 15 %, y el de los que declaran consumirlo actualmente, un 19 %.

Los datos abarcan un periodo de legalización generalizada del cannabis en EE.UU., que comenzó con Colorado en 2014, el primer estado en regular la venta minorista de productos de cannabis a adultos.

Hasta la fecha, 24 estados de EE.UU. han legalizado el consumo de cannabis para adultos mayores de 21 años, es decir, más de la mitad de la población estadounidense. A pesar de los temores de que estas medidas provocaran un aumento del consumo entre los adolescentes, la tendencia es a la baja.

Paul Armentano, subdirector de NORML, comentó sobre los datos de la encuesta federal: «Las afirmaciones sensacionalistas de que las leyes de legalización del consumo por adultos están vinculadas a un mayor consumo de marihuana por parte de los adolescentes simplemente no están respaldadas por datos fiables. Estos hallazgos del gobierno deberían tranquilizar a los legisladores en el sentido de que el acceso al cannabis puede regularse legalmente de una manera que sea segura, eficaz y que no afecte involuntariamente a los hábitos de los jóvenes.»

Conclusiones coherentes en varios informes

Los hallazgos de la NSDUH son coherentes con otros informes, incluidos los datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU., que también muestran un descenso constante de las tasas de consumo de cannabis entre los adolescentes.

Esta tendencia cuestiona la idea de que la legalización del cannabis para adultos fomente el consumo entre los menores y, por el contrario, apoya la hipótesis de que la regulación no conlleva un aumento del consumo de cannabis entre la población más joven.