En un reciente y conmovedor caso que conmocionó a la comunidad cannábica y a la sociedad dominicana, Juan Tomás Llibre Miller, intelectual, ingeniero y activista de 79 años, murió mientras estaba detenido en Puerto Plata.
Llibre, conocido por su ferviente defensa del autocultivo y uso medicinal del cannabis, falleció el 2 de junio en circunstancias que muchos han calificado de inhumanas y negligentes.
Los hechos del caso Juan Tomás Llibre Miller
El 8 de mayo de 2024, Juan Tomás Llibre Miller interpuso un recurso de amparo, equivalente a una cuestión prioritaria de constitucionalidad en Francia, ante el tribunal de Puerto Plata para solicitar la despenalización del cannabis medicinal en la República Dominicana.
libre, que también es ciudadano canadiense, solicitaba autorización para cultivar él mismo cannabis medicinal para uso personal, en particular para producir aceite de cannabis. El aceite de cannabis se utiliza ampliamente en países donde el cannabis medicinal está permitido, como Argentina, Canadá, Uruguay, Colombia, Puerto Rico y Chile.
El 12 de mayo, agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y de la Fiscalía de Puerto Plata allanaron su vivienda y encontraron 47 plantas de cannabis en su terraza. Sin evidencias de narcotráfico, Llibre fue arrestado y trasladado al centro de prisión preventiva de Puerto Plata.
Detención preventiva y demandas por negligencia médica
El 20 de mayo, el Juzgado de Atención Permanente de Puerto Plata dictó tres meses de prisión preventiva contra Llibre, a pesar de su avanzada edad y sus múltiples problemas de salud. La familia de Llibre, a través de su abogado, solicitó reiteradamente asistencia médica debido a su estado crítico, pero las autoridades hicieron caso omiso de estos llamamientos.
El 2 de junio, Juan Tomás Llibre Miller murió en la prisión de Puerto Plata. Su familia dijo que «se veía amarillo y en muy mal estado de salud». A pesar de las peticiones de atención médica, Llibre murió de un «supuesto» paro cardíaco.
Reacciones y peticiones de reforma
La trágica muerte de Juan Tomás Llibre Miller ha provocado un fuerte llamamiento a la revisión y reforma de la Ley 50-88, que penaliza el uso y cultivo de cannabis medicinal en la República Dominicana.
«Nadie debería estar en la cárcel simplemente por consumir o poseer marihuana. Punto y final», afirmó el presidente estadounidense Joe Biden, en un contexto global en el que cada vez más países reconocen el potencial terapéutico del cannabis.
En Alemania, el ministro de Sanidad Karl Lauterbach también destacó los beneficios de legalizar el cannabis: «Es mejor para una ayuda real contra la adicción, para la prevención con niños y jóvenes y para combatir el mercado negro, para el que pronto habrá una alternativa.»
El caso de Juan Tomás Llibre Miller no sólo pone de manifiesto la falta de humanidad en el trato a los presos, sino que también subraya la urgente necesidad de revisar y reformar las leyes que penalizan el consumo y el cultivo de cannabis medicinal.
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