La Comisión Europea ha abierto una investigación sobre las recientes medidas adoptadas por el Gobierno italiano para detener el comercio de CBD y flores de cáñamo.
La medida se produce tras una serie de denuncias de partes interesadas que consideran que las medidas adoptadas por Italia podrían infringir la normativa de la UE.
La decisión impulsada por el gobierno ultraderechista italiano ha suscitado serias preocupaciones, sobre todo porque Italia es un actor clave en el mercado europeo del cáñamo industrial y de los productos CBD.
La decisión de Italia de prohibir el CBD y las flores de cáñamo
El Gobierno italiano, dirigido por la primera ministra Giorgia Meloni, propone una estrategia en dos partes para eliminar las flores de cáñamo legales en la UE, que contienen cannabinoides como el CBD.
Las flores de cáñamo industrial, aunque no son psicoactivas, se utilizan para producir CBD y también se comercializan en Italia como «cannabis light», un producto atractivo para los consumidores que buscan los beneficios de los cannabinoides sin los efectos psicoactivos.
La polémica actual tiene su origen en una enmienda a la Ley de Seguridad de 2023 que impondría una prohibición total de la venta de flores de cáñamo. Esta enmienda fue aprobada por la Cámara de Diputados italiana en septiembre de 2024 y ahora tiene que ser examinada por el Senado italiano. Si se aprueba, la enmienda podría desmantelar efectivamente el mercado del CBD y las flores de cáñamo en Italia, cortando la principal fuente de estos productos.
Además de esta medida legislativa, un decreto implementado el 5 de agosto de 2024 y suspendido en septiembre ya ha intentado clasificar el CBD como sustancia estupefaciente, prohibiendo efectivamente cualquier producto que contenga CBD destinado al consumo interno. Esto ha dejado a muchos productores y minoristas de la industria del cáñamo luchando por navegar en un entorno legal cada vez más restrictivo.
Implicaciones legales y económicas
Uno de los principales argumentos contra los esfuerzos de Italia es que contradicen las leyes de la Unión Europea (UE) sobre la libre circulación de mercancías y la competencia. Canapa Sativa Italia, un grupo comercial que representa a la industria del cáñamo, ha presentado una queja formal ante la Comisión Europea (CE) alegando que las acciones de Italia violan la política agrícola común de la UE y amenazan la competencia leal dentro del mercado europeo.
Para añadir complejidad a la situación, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ya dictaminó en 2021 que los extractos de cáñamo, incluidas hojas y flores, no deben clasificarse como estupefacientes. La sentencia del TJUE subraya que estos extractos, incluido el CBD, son legales y comercializables en la UE.
La sentencia llevó a la Comisión Europea a considerar que el CBD no podía ser tratado como una sustancia estupefaciente. Como consecuencia, muchos Estados miembros de la UE, entre ellos Francia e Italia, revisaron su legislación nacional para ajustarse a esta decisión.
La actual prohibición propuesta en Italia, si se adopta, podría tener consecuencias de gran alcance para varias industrias que dependen de productos de CBD. En particular, el mercado de complementos dietéticos, medicamentos a base de plantas y posiblemente incluso el de cosméticos se verían duramente afectados.
Sin embargo, en 2021, el CBD fue aprobado para su inclusión en Cosing, la base de datos europea para formulaciones cosméticas, lo que indica que el ingrediente es seguro y legal para su uso en productos cosméticos. La legislación propuesta hace temer que el sector de los cosméticos con CBD también pueda ser objeto de restricciones, a pesar de estas protecciones legales. Francia no se queda atrás en el tema, ya que actualmente está intentando que el CBD sea clasificado como reprotóxico y prohibido en cosméticos.
Respuesta de la Comisión Europea
La investigación de la Comisión Europea está siendo seguida de cerca por las partes interesadas de la industria del cáñamo y del CBD.
Valentina Palmisano, diputada italiana del Parlamento Europeo, se mostró satisfecha con el compromiso de la Comisión en este asunto. Según la Sra. Palmisano, la enmienda equipara el cannabis light con las drogas ilegales, un enfoque que considera fundamentalmente erróneo. Palmisano señaló que la enmienda va en contra de la sentencia del TJUE de 2021 y se opone a la normativa de la UE que apoya el comercio y la producción de flores de cáñamo y productos de CBD legales.
La investigación de la Comisión tendrá en cuenta las quejas presentadas por muchas partes interesadas italianas que afirman que las acciones del gobierno podrían perjudicar a la industria del cáñamo de la UE en su conjunto. Si la investigación concluye que la prohibición propuesta por Italia es contraria a la legislación de la UE, podría impedir la aplicación de estas medidas restrictivas y proteger los mercados italiano y europeo de CBD de nuevas perturbaciones.