El interés comercial por el CBD es relativamente reciente y se basa en numerosas afirmaciones sobre la molécula del cannabidiol. Y aunque el CBD por sí solo sólo ha sido aprobado como medicamento para una única indicación, su campo de acción en torno a la salud y el bienestar está demostrando ser mucho más amplio, de ahí el fuerte desarrollo de tiendas de CBD.
He aquí las 6 áreas más avanzadas de la investigación del CBD.
- El CBD puede mejorar los síntomas de la epilepsia
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La evidencia más sólida que tenemos para usar el CBD clínicamente es en el tratamiento de formas raras de epilepsia. En 2019, Epidiolex, una solución oral de CBD (99% CBD, 0,1% THC), fue aprobada para el tratamiento del síndrome de Dravet y el síndrome de Lennox-Gastaut, dos síndromes de epilepsia infantil que son particularmente resistentes a los tratamientos actuales.
Varios ensayos aleatorizados, doble ciego y controlados con placebo han demostrado que el CBD reduce significativamente la frecuencia de las crisis epilépticas en niños y adultos jóvenes con síndrome de Dravet y síndrome de Lennox-Gastaut, y que algunos pacientes quedan libres de crisis como resultado del tratamiento con CBD. Los científicos no están totalmente seguros de cómo los cannabinoides funcionan tan bien para reducir las convulsiones, pero el CBD y el cannabis ya están cambiando la vida de muchos jóvenes que viven con epilepsia.
- El CBD es antiinflamatorio
Aunque el CBD no es un tratamiento reconocido para los trastornos inflamatorios, existen pruebas sólidas de sus potentes propiedades antiinflamatorias. Se ha demostrado que el CBD modula la actividad de las células inmunitarias y, en consecuencia, inhibe la liberación de citoquinas inflamatorias, que son las moléculas que median y exacerban la respuesta inflamatoria del organismo.
Como resultado, el CBD es muy prometedor en el tratamiento del dolor inflamatorio y, a su vez, puede ayudar a aliviar los síntomas de muchas enfermedades asociadas con la inflamación, como la artritis, la esclerosis múltiple, la enfermedad de Alzheimer y la enfermedad inflamatoria intestinal.
- El CBD puede aliviar la ansiedad
Es bien sabido que el sistema endocannabinoide participa en la señalización de la serotonina (nuestra «hormona de la felicidad»). Más recientemente, se ha establecido que el CBD puede ayudar a mejorar la señalización de la serotonina en el cerebro y, como resultado, reducir los síntomas de ansiedad y depresión.
- El CBD puede reducir los efectos negativos del THC
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Para algunas personas, el cannabis puede causar efectos desagradables. En dosis altas, el THC puede provocar ansiedad, pánico y paranoia. Aunque pueda parecer contraintuitivo combatir los cannabinoides con otros cannabinoides, existen pruebas sólidas que sugieren que los aceites de CBD de buena calidad pueden utilizarse para anular los efectos negativos del THC.
- El CBD protege contra la adicción
Siguiendo con el punto anterior, el CBD parece ser extremadamente eficaz en el tratamiento de muchas formas de adicción, incluidas las relacionadas con la dependencia psicológica del cannabis. Como el CBD prácticamente no tiene potencial de abuso, es un candidato ideal para el tratamiento de la adicción y la dependencia.
Las pruebas más sólidas de la eficacia del CBD contra la adicción proceden de personas que sufren trastornos por consumo de opiáceos. Se ha demostrado que el CBD reduce el deseo de consumir heroína en personas que acaban de dejar la droga y actualmente se está probando como tratamiento para la dependencia de opiáceos en Estados Unidos.
- El CBD puede actuar como antipsicótico
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Diversos estudios han demostrado que el CBD puede reducir los síntomas de psicosis en personas con esquizofrenia cuando se administra junto a los medicamentos antipsicóticos existentes. Los investigadores señalaron que «el CBD podría ser una futura opción terapéutica en la psicosis, en general, y en la esquizofrenia, en particular».
