El cannabis y tu cuerpo
Receptor CB1
Los receptores CB1 son un tipo de receptor cannabinoide que se encuentra en el cuerpo. Los cannabinoides como el THC interactúan con estos receptores para inducir algunos de los efectos subjetivos y terapéuticos asociados al cannabis. Los receptores CB1, a los que se une fácilmente el THC, son muy abundantes en el cerebro, por lo que se siente un subidón cuando se consume cannabis con THC. Las sustancias químicas naturales producidas por el cuerpo, como la anandamida y el 2-AG, también activan los receptores CB1.
¿Qué son los receptores CB1?
Los receptores CB1 forman parte de un sistema biológico llamado sistema endocannabinoide, cuya función principal es mantener el equilibrio del funcionamiento de nuestro cuerpo o, más técnicamente, mantener la homeostasis. Estos receptores CB1, que abundan en el cerebro, ayudan a regular la comunicación entre las células al servicio de la homeostasis.
Los receptores CB1 y los compuestos que se unen a ellos pueden visualizarse mediante la analogía de una cerradura y una llave: los receptores son como una cerradura en la que sólo caben ciertas llaves; el THC es un ejemplo de llave que encaja en esta cerradura. Cuando una molécula de THC se encuentra con un receptor CB1, lo activa, permitiendo al consumidor experimentar los efectos del THC. Sin los receptores cannabinoides, el cannabis no podría causar muchos de sus efectos característicos en el cuerpo.
¿Qué hacen los receptores CB1?
Los compuestos del cannabis, como el THC, se unen a los receptores CB1 y los activan, lo que nos permite experimentar algunos de los efectos característicos del cannabis, como la euforia. La activación o inhibición del CB1 en la señalización neuronal también se asocia a una serie de otros efectos, como la sensación sensorial, el dolor, la memoria y la función del estado de ánimo, y la regulación del sueño y el apetito.
Los cannabinoides del cannabis no son los únicos compuestos que interactúan con los receptores CB1, una sustancia química natural llamada anandamida también se une a los receptores CB1. Si alguna vez has hecho algún tipo de carrera, reconocerás la sensación de la anandamida uniéndose a los receptores CB1 en un fenómeno conocido como el «subidón del corredor». Otro cannabinoide producido en el cuerpo, el 2-AG, también se une a los receptores CB1.
La activación repetida y frecuente de los receptores CB1 conduce a una disminución de su expresión, lo que se conoce como el desarrollo de la tolerancia. Por eso solemos experimentar los efectos del cannabis de forma menos intensa a lo largo del tiempo con un consumo frecuente.
¿Cuál es la diferencia con los receptores CB2?
Los receptores CB1 y CB2 son los dos tipos más comunes de receptores endocannabinoides en el cuerpo de los mamíferos. La activación de estos dos tipos de receptores parece tener funciones reguladoras diferentes. Los receptores CB1 parecen desempeñar un papel en la regulación de una amplia gama de funciones homeostáticas que influyen en el sueño, el apetito, la memoria, el estado de ánimo y la experiencia sensorial, entre otras. Se cree que los receptores CB2 están implicados en funciones relacionadas con la inmunidad y la señalización de la inflamación.
¿Cómo afectan el CBD y el THC a los receptores CB1?
El THC, el cannabinoide más común del cannabis y el principal vehículo de sus efectos eufóricos, activa fácilmente los receptores CB1. Esta asociación, que se produce en el cerebro y en todo el sistema nervioso central, explica por qué el cannabis con alto contenido de THC altera tan profundamente nuestro estado de ánimo y nuestra experiencia sensorial.
El CBD interactúa con los receptores CB1 bloqueando el sitio del receptor, lo que cambia la forma en que el THC interactúa con él. Por eso algunos recomiendan tomar CBD con THC si eres sensible a los efectos del THC.